El propósito de este trabajo es presentar los resultados de un estudio piloto que evalúa la aplicabilidad de un programa de tratamiento, originalmente diseñado para adolescentes, en población joven adulta con un trastorno de ansiedad social. La muestra se compone de 12 sujetos que cumplían los criterios diagnósticos de fobia social generalizada y que mayoritariamente presentaban comorbilidad con trastornos del eje I y II. Los resultados muestran la eficacia de esta modalidad de intervención, tanto en las medidas generales de ansiedad social como en las que examinan específicamente las respuestas cognitivas y motoras que componen este trastorno. Junto a esto, la reducción de las respuestas de ansiedad social llevó a la disminución o remisión total de trastornos comórbidos a la fobia social tras la intervención. Todas las escalas mostraron ser sensibles al cambio terapéutico. Además, tanto el programa de tratamiento como su estructura o la competencia de los terapeutas fueron valorados muy positivamente por los participantes. Finalmente, se discuten las limitaciones de este trabajo y las futuras líneas de investigación.