El trastorno límite de la personalidad (TLP) está asociado a una alta incidencia de suicidio. Las pensamientos y creencias positivas pueden actuar como amortiguadores que protegen a la persona de cometer el suicido, a pesar de la existencia de importantes factores de riesgo, como la depresión y la desesperanza. Varios estudios han encontrado una fuerte relación entre bajos niveles de sentido de la vida y el riesgo de suicidio. El objetivo del presente estudio es analizar el papel mediador del sentido de la vida entre la depresión y la desesperanza. Participaron 80 personas con TLP. Los resultados nos indican que el sentido de la vida mostro un efecto de mediación parcial entre la depresión y la desesperanza. El 61% del efecto total de la depresión sobre la desesperanza fue mediado por el sentido de la vida. Estos resultados apoyan que el sentido de la vida actúa como amortiguador de estos factores de riesgo para el suicidio. Es importante tener en cuenta el sentido de la vida en la evaluación y el tratamiento de las pacientes con TLP.