El objetivo de este estudio piloto fue analizar la eficacia de un programa de prevención de la violencia en el noviazgo para modificar las actitudes que justifican la agresión y disminuir los comportamientos de agresión física y psicológica. Se empleó una muestra incidental de 104 estudiantes de instituto (52,9% mujeres), con una edad media de 15,44 años (DT= 1,12). Los participantes fueron evaluados a través de escalas de autoinforme aplicadas una semana antes y una semana después de la implementación del programa de prevención. Los resultados muestran una disminución significativa de las actitudes que justifican el uso de la agresión física y psicológica (tanto cuando son ejercidas por un hombre, p< 0,01; como por una mujer, p< 0,001), sin diferencias en función del sexo de los participantes y el nivel previo de agresión. No se produjeron cambios en las conductas de agresión. Se concluye que los resultados obtenidos son esperanzadores, aunque estudios futuros deben aclarar el efecto del programa a largo plazo, especialmente en lo referente a los comportamientos agresivos.