Este trabajo analizó el efecto que tiene sobre los trastornos psicológicos de los hijos su percepción de las prácticas de crianza, teniendo en cuenta el sexo de los padres y de los hijos, la edad, los problemas económicos, así como la estructura familiar. Participaron 284 adolescentes (156 mujeres y 128 hombres), de entre 11 y 19 años. Los análisis de regresión múltiple mostraron el valor predictivo de la utilización del castigo por ambos progenitores sobre los trastornos interiorizados y exteriorizados de los hijos. Por el contrario, la baja supervisión parental únicamente predijo los problemas exteriorizados, mientras que la retirada del afecto paterna se relacionó con los interiorizados. Otras variables predictoras de los trastornos fueron la percepción de dificultades económicas, el sexo, la edad de los hijos y la existencia de un hogar reconstituido. En los hogares no reconstituidos, la supervisión paterna se relacionó con menos problemas exteriorizados y la inducción materna con menos trastornos interiorizados. Se discute la importancia de las conductas de crianza positivas y el trabajo con familias en proceso de separación o de reconstitución.